Otro pinchazo en el Sudamericano Sub-20 y otra decepción en un torneo en el que parecía que por fin se iba a dar el regreso a la pelea por un título.
Después de una primera ronda impecable, el equipo nacional ajustó este lunes su segunda derrota en el hexagonal final, ahora por 1-0 contra Argentina, resultado que lo dejó sin ninguna opción de pelear el título.
¿Por qué? La victoria de Brasil por 3-1 contra Paraguay hizo que sumara 9 puntos en el hexagonal y obligaba a Colombia no solo a sumar sino a ganarles a los argentinos, lo que a la postre no ocurrió. Ahora los dos tradicionales rivales en la región igualan con 9 puntos y ellos decidirán el campeón.
¿Qué le queda a Colombia? No desfallecer. Aunque el panorama no es, ni de lejos, el que se esperaba al comienzo de esta fase final del Sudamericano Sub-20.
Nuevas cuentas
Ahora la realidad es más cruda: Colombia es tercero de la tabla con 3 puntos, básicamente gracias a la goleada contra Paraguay, que lo escolta en la cuarta posición con esas mismas unidades.
Quedan seis puntos en disputa y la obligación crece: si Colombia gana sus últimos partidos, el jueves contra Chile y el domingo contra Uruguay, sumará 9 puntos y se hará inalcanzable para sus rivales.
Si empata contra Chile o Uruguay y pierde un compromiso de los que le faltan hará 6 puntos, que pueden ser suficientes por el enfrentamiento directo con los paraguayos (goleó 4-0). Con los uruguayos no se ha medido.
¿Y si solo suma 2 puntos, producto de dos empates? Sumará 5 unidades y ahí existe otra carta salvadora: Uruguay no pudo ganarle a Chile y suma solo 1 punto. Está obligado a ganar sus dos compromisos o al menos sumar y esperar que Colombia no lo haga.
El tema puede ser caótico si Colombia pierde sus últimos dos partidos pues con 3 puntos puede ser el único eliminado del hexagonal, ya que Chile está clasificado al ser el anfitrión. En ese caso lo superarían Paraguay y Uruguay si suman cada uno 4 puntos.
