El golpe se iba a hinchas y todos lo sabían. Lo que aún está por verse es qué tan sostenible será el modelo sin nada entre las manos.
Y es que León ha perdido este domingo su llave de cuartos de final del Clausura de la Liga MX, tras verse superado por Cruz Azul por un global de 5-3.
En el 3-2 de la ida fue todo cuesta arriba para los que eran locales, y en la vuelta era previsible una nueva victoria, esta vez por 2-1. Lo que se teme, después de este resultado, es el futuro de dos de los referentes del León.
¿Terminará abruptamente otro ciclo para James?
El asunto se viene discutiendo desde mucho antes de esta eliminación en cuartos de final y no tiene ni siquiera que ver con la Liga MX.
El golpe del que no se ha recuperado León es su exclusión, en un fallo inicial de la FIFA que luego fue ratificado por el TAS, del Mundial de CLubes, a disputarse en Estados Unidos desde el 14 de junio.
Las previsiones deportivas y especialmente financieras pasaban por facturar, mal contados, uno 17 o 18 millones de dólares mínimo, una cantidad que en el medio local no hay manera de compensar. Y ahí es donde se habla de los referentes y del colombiano James Rodríguez.
James, un jugador que costaría cerca de 5 millones de dólares por año, sería uno de los apuntados para salir, pues aunque en 17 partidos sumó 2 goles y dio 6 asistencias, a la hora de las definiciones en la Liga MX no pesó (se perdió la ida de cuartos por una expulsión infantil) y ya no tendrá Mundial, que es la razón última de su fichaje.
Muchos se preguntan si vale la pena sostenerlo, sabiendo que tiene contrato hasta diciembre de 2025, que en unas cuantas semanas podrá negociar con otro club como agente libre y que sin el ingreso del Mundial será un lujo difícil de sostener.
James ha dicho que se siente feliz en León y en Guanajuato, pero estos días de vacaciones que ya disfruta podrían desviar su camino a otro destino. De un posible paso a Pachuca, para disputar el Mundial de Clubes, se especuló pero al final no se llegó a nada.
El otro referente que había llegado pensando en ese Mundial estadounidense era Andrés Guardado, cuyo contrato vence el 30 de junio y seguramente se retirará oficialmente del fútbol.
